Mayo ha sido catalogado como el mes más desfavorable para los mercados bursátiles europeos. El EuroStoxx 50 y el Dax, que mantuvieron un progreso constante a lo largo del año, experimentaron un deterioro significativo. 

El Ibex 35, que ya había sufrido una disminución en marzo debido a tensiones en el sector bancario, ha superado esa caída, aunque aún acumula una disminución del 2,06% al finalizar el mes, perdiendo así los 9.100 puntos.

Evolución del Ibex35 

Durante la primera parte de la sesión, tanto el Ibex 35 como los índices europeos experimentaron descensos moderados, oscilando entre el 0,5% y el 1%, sin superar en ningún caso esos niveles. Estos retrocedieron ya presagiaban un cierre mensual desfavorable, pero las caídas se intensificaron en la segunda parte de la negociación, lo cual afectó al cierre de los mercados en el Viejo Continente.

A medida que avanzaba la sesión, el sentimiento pesimista fue imponiéndose y las bolsas optaron por agarrarse a los aspectos menos favorables. Por ejemplo, el índice S&P 500 cerró por debajo de los 4.200 puntos al finalizar la jornada europea, lo cual fue atribuido a la constatación de la fortaleza del mercado laboral. Esta situación influyó en la tendencia negativa de los mercados.

El panorama general reflejó una sesión en la que las perspectivas se volvieron menos optimistas, lo cual afectó tanto a los mercados europeos como al estadounidense. Los inversores se mostraron cautelosos y adoptaron una postura más conservadora ante la incertidumbre económica y los posibles riesgos asociados. Esto contribuyó a una intensificación de las caídas en la segunda parte de la sesión, lo que finalmente resultó en un cierre mensual en rojo para los mercados europeos.

A pesar de los diversos factores que han afectado a los mercados bursátiles, estos aún mantienen un balance general positivo en el ejercicio. A lo largo del período, se han ido disipando las turbulencias financieras que anteriormente generaron preocupación, lo cual ha sido un factor positivo para los inversores. Sin embargo, otros catalizadores como las políticas de los bancos centrales y la preocupación por la inflación han seguido influyendo en la dirección de los mercados de renta variable.

Durante el mes de mayo, se ha agregado otro elemento de incertidumbre, que es la renovación del techo de deuda en Estados Unidos. Este tema ha generado preocupación entre los inversores, ya que la falta de un acuerdo en este ámbito podría tener consecuencias significativas tanto para la economía estadounidense como para los mercados globales. La incertidumbre en torno a este asunto ha añadido presión adicional a los mercados en el mes de mayo.

Es importante destacar que, en general, los mercados bursátiles han logrado mantener un rendimiento positivo a lo largo del ejercicio. Esto puede atribuirse a una combinación de factores, como la recuperación económica sólida en muchas regiones, los estímulos fiscales y monetarios implementados por los gobiernos y los bancos centrales, así como el optimismo en torno a la reactivación económica post pandemia. 

Sin embargo, los inversores deben permanecer atentos a los diversos frentes que cotizan en los mercados, ya que estos pueden seguir influyendo en la dirección y la volatilidad de los precios de los activos.

Aunque el Ibex 35 ha enfrentado dificultades para avanzar desde marzo, el índice ha logrado una revalorización del 9% a nivel anual, a pesar de los desafíos que se presentaron en mayo. El selectivo nacional ha encontrado un nivel de soporte en los 9.048 puntos, establecido por el asesor de Ecotrader, Joan Cabrero, después de no haber sido capaz de cerrar el espacio vacío que se abrió a la baja desde los 9.267 puntos. Recientemente, el índice cerró en los 9.050,2 puntos.